En España, fue el pasado 9 de Diciembre del 2014 cuando el Tribunal Superior de Justicia de Madrid ordenó a la empresa californiana Uber el cese en su actividad en todo el territorio nacional por considerar que está ejerciendo “competencia desleal” con los taxistas.
Al igual que la gran mayoría de las multinacionales digitales de California, Uber tiene sede en el paraíso fiscal de Delaware.
Para muchos, como yo mismo, lo de Uber es un claro ejemplo de “competencia desleal” un caso simple que no tiene tantas reflexiones ni vueltas de tuerca como algunos le quieren dar. Esos que tanto defienden Uber, no se han visto nunca en el día a día de una empresa que paga sus impuestos y se esfuerza en cumplir las normas.
Imagina que pones un local de bocadillos en tu ciudad y pagas licencia e impuestos al Ayuntamiento, inspecciones sanitarias, licencias de manipulación de alimentos, agua, electricidad, seguros y personal. Entonces llega un tipo con un carrito y se pone a vender bocadillos delante de tu establecimiento. Solo hay dos soluciones: el tipo se va con el carrito a otra parte o bien te quitan todos los impuestos, restricciones y controles a tu local de bocadillos. Lo malo de esto último es que te gustaría comer bocadillos con ciertas garantías sanitarias.
Son muchos los países dónde ya está prohibido Uber. Supone un grave perjuicio para los taxistas que pagan una barbaridad de impuestos y pasan muchos controles para realizar su actividad profesional.
Con Dropbox pasa lo mismo. Una empresa Europea de almacenamiento en la Nube debe cumplir con su carga de impuestos y además cumplir con las normas de privacidad y protección de datos. Dropbox deja muy claro en sus condiciones legales que está bajo las leyes del estado de California, ojo porque estas se parecen muy poco a las europeas.
En Europa y también en muchos países de América Latina, existen normas legales para las empresas de Cloud Computing. Una empresa de Cloud Computing bajo una legislación como la europea ofrece unas garantías básicas a sus clientes:
- No traficar, manipular ni vender los datos de sus clientes.
- Adoptar medidas de seguridad para evitar que los datos caigan en manos de terceros.
- Medidas físicas de protección de la información, seguridad física de las instalaciones, protección ante desastres naturales y control de acceso de los empleados.
Las empresas que cumplen la ley tienen unos costes de mantenimiento muy superiores frente a las que no la cumplen. Por ejemplo, el coste de almacenar 1Gb en Europa puede ser hasta 18 veces superior frente a una empresa de California que tiene sede en un paraíso fiscal.
Mantener un centro de datos legal en Europa o en un país de América Latina, dónde se cumplen las leyes de protección de datos, conlleva innumerables costes añadidos. Un centro de datos legal, cuenta con una serie de condiciones que una empresa de California no ha de cumplir. Podemos citar unas cuantas:
- El centro de datos tiene una localización física concreta. Se trata de un edificio dónde están los servidores.
- Se trata de una empresa localizable y con un domicilio social.
- Los trabajadores, con contratos de la empresa, han de identificarse para entrar, tarjetas de acceso, huellas dactilares, etc.
- Video vigilancia de las instalaciones.
- Sistemas de regulación de la temperatura y medidas anti-incendios.
- Sistemas de alimentación eléctrica ininterrumpida.
- Empresa de seguridad para la vigilancia de las instalaciones.
- Calidad de los elementos informáticos para evitar roturas. Copias de seguridad.
- Departamento con personal informático especializado en la seguridad del acceso a los datos.
- Redundancia de la conexión a Internet. No basta con una conexión, si cae una conexión se sigue trabajando con otra.
- El personal, es contratado por la empresa con cláusulas de privacidad y protección de los datos almacenados. Contratos legales en ese país.
- Pagar impuestos, licencias, inspecciones en el país dónde reside la empresa, recordar que no es un paraíso fiscal.
Como puede verse, las condiciones que ha de cumplir un almacenamiento legal encarecen y dificultan la prestación del servicio frente a los otros. Por eso Dropbox es para las empresas de almacenamiento en la Nube, lo mismo que Uber es para los taxistas.
Pero claro, si tienes una empresa y deseas almacenar tus datos con garantías te gustará que se cumplan las normas. Igual que si usas Uber, no sabes si el que conduce es un atracador o un violador.
Pondré otro ejemplo que no trata de almacenamiento en la Nube. Hace poco que se conoció como el Antivirus Avast espiaba la navegación de sus usuarios. Desde este Blog hemos recomendado el uso del Antivirus Avira como alternativa gratuita a Avast.
El Antivirus Avira, tiene su sede en Alemania, en concreto en Munich, esto se publica claramente en su web.
La cuestión es que al estar en Alemania, ha de cumplir las leyes de protección de datos y seguridad europeas. Esto impide que esta empresa pueda espiar o recopilar datos de sus usuarios porque las multas en tal caso van desde 20.000€ hasta 600.000€. Por ley, este espionaje no puede ser realizado por esta empresa y si lo hace tendrá graves consecuencias, no como en otros lugares con legislaciones propias del salvaje Oeste.
Deberian buscarse metodos para le reduccion de costes de almacenamiento en Europa y asi poder competir con mas opciones…. con otras empresas…
Esa sería una magnífica solución. Se tendría un Cloud con privacidad y seguridad a un coste mucho más competitivo.
Creo que uno de los puntos clave sería abaratar el coste de la conexión, esto beneficiaría a toda la industria. Los costes de conectividad a Internet en USA son ínfimos comparados a los europeos. En Europa las compañías de telecomunicaciones mantienen unos precios muy elevados por una série de razones que merecerían un artíulo completo. También está el gasto energético que bien se podría solventar aunando conceptos como las energías renovables.
En el fondo de la cuestión hay un problema de concepto. Los métodos anteriores que propongo son medidas de índole regulatorio o político, seguro que hay muchas más. El concepto de fondo es que en otros países el Cloud Computing se considera una industria y en europa y américa latina no tanto.
Si se ha regulado tanto en el tema de la seguridad y la privacidad se debería haber regulado en cuanto a los recursos de las empresas de Cloud Computing, me refiero al hecho de disponer de conectividad y consumo eléctrico bajo precios reducidos, tan solo esto, aunque habría muchas más fórmulas.
En este terreno las autoridades tendrán sobrada justificación para tomar medidas de este tipo. Consideremos tan solo el impacto en la eficiencia energética y ecológico del Cloud Computing. Un proveedor puede dar servicio a miles de empresas dónde desaparecerían sus servidores de oficina y el aire acondicionado que mantiene “frescas” esta máquinas.