En el mundo del software, los distribuidores y en menos medida los resellers hace años que se mueven en un mercado roto.
Mientras el mundo del software se desplazaba hacia una mayor y mejor oferta de plataformas o aplicaciones en la Nube, los grandes distribuidores hacían caso omiso y continuaban con la distribución de licencias y la venta de hardware.
El resultado es aún peor que el de aquellas discográficas que no entendieron que el formato de la música había cambiado y ya no se iban a vender tantos CDs.
La caída de los grandes distribuidores y la oportunidad de los medianos y pequeños.
Grandes distribuidores que antaño fueron un referente andan hoy en día bajo mínimos y con altas posibilidades de cierre. La venta de dispositivos, de PCs o de servidores es lo único que los mantiene.
Pero de igual forma que decimos que los grandes están perdidos. Los medianos y los pequeños tienen una gran oportunidad.
Hablamos de las Pymes de servicios informáticos. Unas empresas que por decirlo de alguna forma han seguido manteniendo contacto con la realidad.
Nos referimos a empresas en las que ni la venta de software ni la instalación de ordenadores son por si solos el núcleo de sus servicios. La formación a sus clientes, la instalación tanto de hardware o software, el mantenimiento y la resolución de incidencias sí forman parte de su carta de servicios.
Cuando una empresa contrata los servicios de este tipo de proveedores, si el servicio es bueno se convierten en un aliado de confianza. Hay que ser muy obtuso para no darse cuenta que la tan cacareada digitalización depende en gran medida de estas empresas de servicios informáticos.
Los nuevos sistemas Cloud y su implantación en las empresas.
En un momento en que la IA está absolutamente de moda, habría que recordar a muchos que su implantación pasa necesariamente por plataformas en la Nube. Ciertamente, existen aún alternativas de instalar en casa para el software necesario en una empresa, por ejemplo se puede optar por un NAS o por un servidor, si se necesita almacenamiento de archivos, pero nadie puede montar en casa un sistema IA.
El futuro del software, pasa necesaria e inevitablemente por sistemas en la Nube.
Esto para un distribuidor o reseller abre un mundo de oportunidades dónde abarcar un mercado que antes era exclusivo de los grandes, esos grandes en proceso de extinción como los dinosaurios.
El distribuidor ahora trabaja sobre una plataforma en la Nube que le facilita abrir cuentas para sus clientes, instalarles o proveerles de acceso al sistema, instruirles y proporcionarles el servicio.
Ya no vende licencias, ni va con CDs a instalar a la empresa, ya no vende ni instala servidores. Las ventajas pueden ser sustanciales.
Las principales ventajas a considerar son las siguientes:
- Un incremento casi ilimitado en el número de clientes.
- Una deslocalización de los servicios prestados. El distribuidor ya no se encuentra restringido a su área de influencia de 100 Km a la redonda. El Cloud está en todas partes, los servicios en remoto son ya naturales para las empresas.
La alianza entre los proveedores de servicios informáticos y las plataformas Cloud se está forjando en estos momentos. Un momento en que se están usando herramientas de la Nube que fueron diseñadas para particulares y no para empresas.