Mostrando de manera muy sencilla como funciona el correo electrónico se pueden comprender los conceptos de identidad y privacidad involucrados en la transmisión de información por este medio.
Muchas personas desconocen el funcionamiento del correo electrónico.
En muchos casos, las personas asumen que el correo llega directamente al receptor de alguna manera que escapa a su comprensión.
Entender el funcionamiento del correo también facilita la comprensión los conceptos relacionados con el Cloud Computing o con la propia Web.
Hay un montón de sitios en la Web dónde se explica el funcionamiento del correo electrónico, en la mayoría de los casos se incluye demasiada información técnica que confunde al lector.
En este artículo, vamos a intentar explicarlo de forma sencilla, porque entender como funciona el correo es también entender como funciona un servicio en Cloud.
El correo electrónico puede ser considerado como la herramienta más antigua y de mayor éxito de Internet. Actualmente podemos considerar que ha sido la herramienta Cloud Computing de mayor éxito en la red desde sus inicios.
Diferencia entre Correo Web y Cliente de Correo
Antes de comenzar hay que resolver una gran confusión.
Se trata de la diferencia entre “Correo Web” y un “Cliente de Correo”. Me consta que hay infinidad de personas que piensan que el correo electrónico consiste en una página web dónde metes tus claves y manejas el entorno de envío y recepción de emails.
El Correo Web, que es el comunmente llamado Webmail consiste en eso, una Web a la que se accede por claves y te permite gestionar el correo.
Hay que entender que el correo es un servicio independiente de la forma en que te conectas, sea por Webmail o por un programa.
A una cuenta de correo, casi siempre nos podremos conectar por Webmail, con OutLook o con nuestro móvil. Cambia la aplicación con la que nos conectamos pero no el servicio. Lo mismo pasa con otros servicios como Dataprius, siempre podrás conectarte desde la web o desde la aplicación que has descargado e instalado en el ordenador.
La diferencia en cuanto al acceso al servicio entre un Cliente de Correo y el Webmail es que con el Webmail se entra a la cuenta con el navegador de Internet.
Por otro lado, un Cliente de Correo es cualquier aplicación que instalada en el ordenador o dispositivo te permite conectar a tu cuenta de correo, normalmente abriendo la aplicación en el ordenador o dispositivo usado.
Un ejemplo de Webmail son las cuentas de Gmail a las que la mayoría de la gente accede con su navegador:
Unos ejemplos de Clientes de Correo pueden ser: OutLook o Thunderbird.
Por supuesto, también el acceso al correo desde el móvil se realiza con un Cliente de Correo que suele venir ya instalado.
La idea que debe quedar muy clara es que el correo electrónico es un servicio independiente de la forma en que te conectas. Para conectar a tu cuenta de correo siempre podrás usar ambos medios, el Webmail o la aplicación que tengas en tu ordenador móvil o tableta.
¿Como funciona el correo electrónico?
Todo el mundo sabe que en su móvil o en su ordenador debe configurar unos parámetros para conectarse a su cuenta de correo. Se rellenan unos campos de un formulario dónde hay que poner los “Servidores” y la contraseña. A continuación veremos en que consisten estos servidores y como funciona el envío de un correo.
Cuando vas a enviar una carta mediante correo tradicional, has de depositarla en un buzón, después el cartero vendrá, la recogerá y procesará en envío a su destinatario.
Pues en Internet siempre hay dos buzones.
La carta se envía a un primer buzón, este buzón se la pasa al buzón del receptor y después el receptor lee la carta que le ha llegado a su buzón. Cada usuario tiene su propio buzón que le permite enviar y recibir correos.
Se puede asimilar que al igual que en el correo tradicional, el correo electrónico también funciona con buzones, lo que ocurre en este caso, es que a esos buzones se les llaman “Servidores”.
Para entenderlo, basta con que pongamos nombres a las cosas y entonces el diagrama queda de la siguiente forma:
Cuando Juan envía un email, éste es depositado temporalmente en su Servidor de Correo, el servidor se encarga entonces de leer la dirección del destinatario y enviar el email a su Servidor correspondiente. Cuando Pedro vaya a leer el correo solo tendrá que descargar el email que le había enviado Juan.
En el correo electrónico cada uno tenemos un buzón que es el “Servidor de Correo”. Es por ello que cuando vas a configurar tu cuenta, se te pide que rellenes el nombre de tu servidor. En la realidad, la cosa se puede complicar un poco más porque puede haber un servidor de “salida” y otro de “entrada”, esto solo significa que hay un buzón para enviar y otro para recibir.
Cuando se trata de un servidor que envía correos se le denomina SMTP, un acrónimo de Simple Mail Transfer Protocol. En la actualidad, lo que se impone tanto para enviar como para recibir son los servidores IMAP, que significa Internet Message Access Protocol. Las siglas POP provienen de Post Office Protocol.
La identidad de los correos
Todo el mundo sabe que las cuentas gratuitas de correo del tipo Gmail o Hotmail pueden ser creadas y usadas en cualquier momento por cualquiera. Esto permite que se pueda tomar la identidad de cualquiera.
En la siguiente imagen se muestra la creación de una cuenta Gmail para Barack Obama:
En los tiempos del Cloud Computing cada vez es más importante disponer de una identidad fiable en la red. Para las empresas esto es primordial.
No se entiende que, si una empresa o profesional quiere cuidar su imagen o identidad utilice un correo de Gmail o cualquier cuenta de tipo gratuita. Cuando se recibe un correo de Gmail de alguien que “dice ser” una empresa o profesional surgen las siguientes dudas:
1) ¿El que me envía el correo es realmente quién dice ser?
2) Si es quién dice ser, no han podido invertir los 14€ al año que cuesta un dominio con su correo propio.
3) ¿Le preocupa la privacidad y la confidencialidad de los correos?
Comprobar la identidad de alguien que envía un correo con un dominio propio es sencillo. Basta con hacer comprobaciones sobre el dominio del correo, es decir lo que viene detrás de la arroba “@”. Si nos llega un correo de “juan@iberia.com”. Lo más fácil es:
1) Buscar “iberia.com” en Google para llegar a la página web del dominio.
2) Hacer una consulta “Whois”, es decir ¿Quién es? Hay muchas web que permiten hacer la consulta y basta con meter el nombre del dominio. Con este enlace de Nominalia puede hacerse perfectamente.
La privacidad de los correos
La privacidad de los correos y de los archivos adjuntos que se envían depende mucho de los servidores o “buzones” que se utilizan.
Ya sabemos que para enviar un email hay al menos dos “buzones” que participan en el proceso. Si alguno de los dos “buzones” es poco fiable entonces el envío podrá ser visto e inspeccionado por terceros.
Para asegurarnos de la privacidad de los correos, el primer paso sería asegurarnos de que nuestro servidor (buzón) es fiable.
Normalmente, las garantías las aporta nuestro proveedor del servicio de correo que suele ser el mismo donde hemos contratado nuestro dominio.
Los proveedores en el ámbito de la Unión Europea operan bajo las leyes de Protección de Datos europeas lo que aporta una tremenda garantía.
Conviene huir de las soluciones baratas o gratuitas que ahorran costes en seguridad y privacidad, además pueden hacer uso de un almacenamiento externo de los archivos bajo jurisdicciones que no contemplan la privacidad de los datos almacenados.
El envío de correos hacia un buzón (servidor) poco fiable es la parte que escapa a nuestro control.
El caso de envío a Gmail
Un caso típico de vulneración de privacidad es cuando enviamos un correo a Gmail.
Por mucho que nos esforcemos en contratar un buen servicio para nuestro buzón de correo, si enviamos un email a una cuenta de Gmail sabemos que con seguridad será leído por otros, al menos los propios de Gmail, pensar que de puertas adentro pueden hacer lo que quieran.
Que Gmail lee los correos de los usuarios es un hecho reconocido: El Mundo: Privacidad de Gmail , Chile 24 horas: Gmail admite que lee correos.
Evitar esta situación sin usar otros medios pasa por abstenerse de enviar información sensible a aquellos que usan Gmail u otras cuentas gratuitas.
Como soluciona Dataprius el problema
Dataprius soluciona el anterior problema de una forma muy sencilla, sobre todo para el envío de archivos adjuntos.
Dataprius envía los archivos mediante enlaces que van insertados en el email. Para acceder a los archivos habrá que hacer click en el botón. Recordar que si alguien hace click en el botón entonces nos llegará un email de aviso de acceso y además dicho acceso quedará registrado en los historiales.
Como hemos visto, la privacidad de los correos depende mucho de los medios involucrados en la transmisión de un email.
En nuestro caso, Dataprius aporta una solución sencilla que evita este problema aunque la parte receptora ignore estos conceptos.
Un gran artículo. Se entiende perfecto.
Muchas gracias por compartirlo.
Una exposición brillante. Se debe compartir con muchos usuarios. Un millón de Gracias, por el trabajo!
Gracias!