Habitual, demasiado habitual es que el gerente de una Pyme diga que no se ocupa de la Privacidad de los archivos de su empresa porque no tiene nada que ocultar o porque la información que maneja no es interesante.
Estimado Sr. Puede que a usted no le importe facilitar sus datos personales a terceros, sus números de cuenta, el lugar dónde vive, su coche, sus facturas, sus informes médicos, sus créditos bancarios, sus deudas, sus seguros, sus aficiones e incluso los datos de su mujer y de sus hijos de los cuales usted no es propietario. Si, puede que nada de esto le importe, lo demuestra cuando usa Dropbox, cuando usa Google Apps, cuando utiliza Whats’app, cuando sube contenidos y fotos a Facebook. Sabemos que esto a usted no le importa. El problema es que usted entienda que no se trata de eso.
En la Pyme no estamos hablando de que al propietario, el gerente o los socios no les importen sus datos personales. Las leyes y normas de privacidad y protección de datos no están para eso. Las normas están para preservar la privacidad y el buen uso de los datos y archivos de sus clientes.
Una Pyme siempre maneja archivos que contienen datos personales, direcciones de clientes, datos de contacto, números de cuenta, eso como mínimo.
Estoy seguro que al cliente le importa poco también que estos señores hagan lo que quieran con su datos personales y hasta con su vida. Seguro que piensan que si este señor quiere proporcionar el historial de su vida completo a estas aplicaciones gratuitas es su problema, la publicidad que le harán es quizá la menor de las preocupaciones. Tarde o temprano la información de que disponen otros y que él alimenta día a día, podría ser utilizada de formas poco éticas, pueden llegar a saber de ellos mucho más de lo que suponen, puede que el Big Data ya lo tenga clasificado en algunas categorías, mal pagador, socio no fiable, demasiados créditos, demasiado viejo, profesional no capacitado, demasiados compromisos, demasiados gastos, salud cuestionable, jurídicamente conflictivo, problemas matrimoniales, poco inteligente, etc. El Big data son máquinas y las máquinas están exentas de juicios morales o éticos.
Al cliente de la Pyme si que le importa lo que hagan con sus datos. Es por eso que existen leyes de protección de la privacidad. Las leyes han de proteger la privacidad de los clientes.
Nadie contrataría los servicios de una empresa si sabe que sus datos personales van a ser donados de forma gratuita por la empresa en la que ha confiado.
Todos somos clientes de algún tipo de Pyme que maneja algún tipo de datos personales. Pongamos unos ejemplos:
1) ¿Usted acudiría a un médico sabiendo que, el expediente que este realiza para su seguimiento, circula por Internet sin control y almacenándose en países que permiten compartir esa información con terceros? Pongamos por caso que el médico usa Gmail o Dropbox.
2) ¿Usted contrataría un seguro a una empresa que permite que los datos de su póliza circulen por Internet sin control? Pongamos por caso que la empresa usa Gmail o Dropbox.
3) ¿Usted contraría los servicios de un despacho de abogados sabiendo que su expediente circula por Internet sin protección de la privacidad y almacenándose en California dónde no hay ley que prohíba su uso para otras cosas? Pongamos por caso que el despacho uso Google Apps.
4) ¿Contrataría un viaje? La agencia de viajes tiene los datos personales de su familia, dónde se hospedará, los vuelos en los que viaja, posiblemente su número de tarjeta o cuenta corriente. ¿Lo haría si sabe que usa Dropbox o Drive para almacenar sus datos?
Como todos somos clientes todos debemos exigir nuestro derecho a la privacidad. Nuestro derecho a la privacidad es más fuerte que la desidia o el ahorro que pretende obtener la Pyme con la que contratamos un producto o servicio. Es tan fuerte que existen leyes al respecto.
Cuando un gerente o responsable de una Pyme dice que sus datos no valen nada también se equivoca. Para otros, la información de este Sr. es extremadamente interesante, para todas las empresas que proporcionan aplicaciones gratuitas de uso masivo y que están en USA esta información es tan interesante que tiene un valor económico que ronda entre los 80$ y los 120$ por cada usuario. Es tan interesante que incluso se han desarrollado herramientas informáticas muy potentes para analizar y extraer datos de esa información ,es lo que se llama el Big data.
Muy bueno lo que se comenta en este artículo.
Yo me dedico al diseño web en despachos de abogados y os digo que la situación es terrible. Más bien parece que no se quiere entender. Los despachos de abogados manejan información muy sensible y todos sus archivos han de ser confidenciales. Pues hay cientos de despachos de abogados usando Dropbox, Drive e incluso enviando archivos a sus clentes a cuentas de Gmail ¡un horror! Muchas veces dicen que ellos no tienen nada que ocultar, es como una respuesta que se dice sin pensar.
Yo creo que los abogados son los que menos cuidan de la privacidad y la seguridad de los documentos de sus clientes, creo que desconocen incluso las leyes de protección de datos, si no será que les da igual que un día un cliente los denuncie y les pongan 300.000€ de multa, además ese cliente tendrá toda la razón del mundo.
El cliente tiene derecho a un adecuado tratamiento de sus datos, ni en los despachos ni en ninguna Pyme son dueños de esos datos.
Gracias.
Mmmm, me ha dado que pensar esto. Gracias.
Lo que hay que pensar que a la mayoría de las empresas se las suda los datos de los clientes. Lo que importa es ganar dinero.