El Almacenamiento en la Nube sigue siendo el servicio más demandado en la industria del software en Cloud. Sin embargo, ni su nombre, ni la utilidad final tienen nada que ver con la necesidad de las empresas.
Hay muchas prestaciones que van antes del puro almacenamiento:
- Seguridad y privacidad de los documentos almacenados. Estableciendo roles y permisos.
- Facilidad y orden al compartir los documentos con empleados y clientes.
- Dinámica de trabajo sencilla con los archivos, que no deben producir conflictos, confusiones o pérdidas.
- Garantías de permanencia de los datos. Mediante copias de seguridad, redundancia u otros métodos.
- Garantías de cumplimiento legal en cuanto a la privacidad y no apropiación de datos por parte del proveedor ni de terceros.
- Independencia de ordenadores o dispositivos locales para evitar catástrofes por ataques o Ransomware.
No se trata de guardar archivos
En 2020 ya escribimos un artículo con bastante éxito sobre este tema:
Desde entonces hasta ahora, de forma natural, la demanda de servicios se ha orientado hacia parámetros de seguridad y garantías, a esto que aún se llama Almacenamiento en la Nube.
Se llama Almacenamiento en la Nube cuando realmente se necesita un Sistema empresarial de archivos
Todo esto tiene su origen, lo que propicia la confusión actual.
Las llamadas aplicaciones de almacenamiento en la Nube han alcanzado gran popularidad. Todo el mundo conoce en mayor o menor medida sistemas con Google Drive, Dropbox o OneDrive.
Ya desde un primer momento se podía intuir que el uso de estos servicios no se corresponde con el concepto de guardar o almacenar. Las empresas comenzaron a usar estos sistemas por que era lo conocido y era lo que les permitía compartir, sobre todo considerando el acceso a esos archivos desde cualquier lugar.
Esos sistemas nacieron para un uso particular. Al principio proporcionaban un modo de expansión del espacio de almacenamiento. Pero desde el primer momento empezaron a utilizarse de otra manera.
Es sencillo constatar. Basta observar cómo la evolución de estas herramientas en su camino hacia satisfacer la necesidades de una empresa, ha sido un tanto tortuosa y hasta tosca.
Por ejemplo, en sus inicios estas herramientas no disponían de permisos de acceso a las diferentes carpetas, algo imprescindible en una empresa dónde se definen parcelas de trabajo con los documentos para cada empleado y área de trabajo.
No ofrecían trazabilidad, ni copias de seguridad. A día de hoy la empresa ni siquiera controla que empleados tienen acceso a los documentos.
Disponer de mecanismos de protección de los archivos, la seguridad o la protección de los datos nunca han venido siendo prioridades de los almacenamientos en la Nube populares.
Sus dinámicas de sincronización de carpetas, que están en los ordenadores de los empleados, los conflictos y la desorganización que se producen son consecuencias evitables, pero esto sería si hubiesen estado diseñadas para empresas desde su concepción.
Una Nube para empresas no enfoca su utilidad en el almacenamiento. El enfoque es la operativa y las dinámicas de uso en un entorno empresarial.
Lo que se sigue denominando Almacenamiento en la Nube no proporciona las características que se necesitan en una empresa. Intranet en Cloud o Sistema de archivos en Cloud como se define Dataprius es mucho más apropiado.
Más que solo almacenar, lo que quiero es un entorno de trabajo en la nube, que sirva para muchas cosas de trabajo diaria, permitiendo el teletrabajo y con los archivos seguros.
Al final depende de cada usuario. Algunos solo quieren almacenar en la nube. Como copia de seguridad en la nube extra. Otros un entorno de trabajo completo en la nube, directamente trabajando sobre ella.